Centro de Educación de Personas Adultas

Fernando Marrero Pulido / Arucas-Firgas

Historia del centro

El Centro de Educación de Personas Adultas “Fernando Marrero Pulido” Arucas-Firgas inició su tarea durante el curso 89-90 con tres profesores en las instalaciones en las que actualmente continúa ubicado el centro.

Actualmente el claustro lo forman cinco docentes que atienden a los cuatro grupos de Formación Básica Inicial y dos grupos de Formación Básica Post inicial (obtención del Graduado en Secundaria). A esos docentes hay que sumar a una docente más que, en prolongación de jornada, imparte el curso de Informática Básica.

Existen 2 aulas más en el municipio de Arucas en las que se imparte Formación Básica Inicial .

El perfil del alumnado ha variado considerablemente en estos años. El número de usuarios durante el presente curso escolar es de unos 100, de los cuales unos 50 desean obtener el Graduado en Secundaria, bien porque sólo tienen el Graduado Escolar o bien porque han fracasado en el IES y su única salida es un centro de Adultos. y unos 50 son mayores de 55 años que desean aprender lo que no pudieron haceer cuando jóvenes y mantener el cerebro activo.

El centro participa actualmente en dos proyectos Erasmus +

    • Ka 104 2019.2021.

    • Acreditación Erasmus 2021-2027

Basado en escritos redactados por el primer director del centro D. Fernando Marrero Pulido.

“Hace escasamente un año esbozábamos un proyecto para optar a las plazas que se abrían a concurso público para dotar del profesorado mínimo al recién creado Centro de Adultos de Arucas. Dicho proyecto lo titulábamos “y nació una esperanza”. Y lo titulábamos así porque el panorama cultural de Arucas, sediento y ávido en unas frías estadísticas así nos lo sugería. Esa esperanza ilusionada que tanto demandaba esta demarcación es ya una hermosa realidad. Por nuestros lares, como decía nuestra primera autoridad local en el acto de inauguración del curso, nunca ninguna fuerza tuvo tanto poder de captación como lo ha tenido el Centro de Educación de Adultos de Arucas. Y eso no demuestra otra cosa que la confirmación de lo que suponíamos: que nuestra población estaba ansiosa de capacitarse, de formarse, de estar preparada para los retos que exige nuestra sociedad y nuestro futuro europeo…es ocasión para hacer un esbozo de memoria de este primer año de singladura o de aventura en el que nos embarcamos tan preñada de sudores y apuros pero adobados con puñados de satisfacciones.

Una vez que los tres profesores que alcanzamos esta plaza nos encontramos sólo con un campo tremendo donde trabajar, no teníamos ni medios ni herramientas, sólo mucha ilusión y hambre por hacer algo singular y primero en Arucas. ¿Cómo podrá enterarse la gente de nuestra existencia? El ayuntamiento nos pagó unas octavillas (6000) que repartimos a los niños de todos los colegios de la zona y de Firgas para que lo hicieran llegar a su casa. A su vez, nuestro amigo Paco Rosales nos prestó un equipo de megafonía, que usamos como verdaderos feriantes por todas las calles y barrios de nuestro municipio y de Firgas. El resultado fue que en el período de matrícula se nos acercaron 1259 personas que pedían cursos académicos y ocupacionales…¿Dónde atender a tanta gente?

El Excmo. Ayuntamiento había destinado dos locales que aún estaban sin terminar. Como anécdota, digo que Manolo Déniz, nuestro jefe de estudios, estaba aplomado, desolado, pesimista; pero todo fue saliendo…a base de machaqueo el habitáculo se terminó. Por lo demás, no teníamos absolutamente nada. Nos valimos, siempre con el Sr. Alcalde, del inspector de zona D. Manuel Ávila para que convocara una reunión con los directores de los colegios y conserjes de los mismos. El resultado fue una colaboración sincera de todos ellos. Nos facilitaron sus aulas para impartir las clases, mesas de profesores, pizarras….”

“En los comienzos del curso 90-91 fue creado el CEA Arucas con una plantilla de tres profesores. Tiene como zona de influencia los municipios de Arucas, Firgas y Moya, aunque este último continúa vinculado al CEA de Gáldar. Como anécdota que comparto con ustedes, a pesar de la experiencia de años de enseñanza y de los batacazos y desilusiones con que nos hemos tropezado durante la misma, creyendo de que todo monte era orégano, comenzamos a trabajar con una ilusión verdaderamente juvenil, empezando quizá, la nueva casa por el tejado, es decir, captando alumnos. Megáfono en mano recorrimos toda la geografía de los municipios anunciando la creación del nuevo centro y la oferta de cursos que brindábamos. El resultado fue que en el período de matrícula se nos acercaron 1259 personas. Cuando nos sentamos para ver cómo dar de comer a tanta gente, nos tropezamos con la más cruel realidad: casi un pozo sin salida; sin planificación, sin dinero, sin locales, sin medios materiales y sin vergüenza. Pensamos que, gracias a esto último, pudimos salir a la luz. En este curso se atendió, en diferentes locales particulares y oficiales, a todos los que nos demandaron cursos académicos y se atendió a los alumnos que solicitaron cursos de inglés, cocina, corte y puericultura.

El pasado curso el ayuntamiento nos cedió el edificio que se estaba utilizando como extensión del Instituto Domingo Rivero. Está ubicado en la calle Huelva, 9 de la Hoya de San Juan. Desgraciada e incomprensiblemente lo compartimos con el Centro de Apoyo y recursos de la zona. Cuenta con quince dependencias, espacioso jardín, cancha y servicios. Con ayuda del ayuntamiento, alumnos y profesores a principios de curso ha retocado un poco, adecuando algunas dependencias, pintándolo y adecentándolo.

Contamos con una plantilla de tres profesores que asume los cargos directivos y nos ayudan en la tarea de enseñanza 19 profesores en prolongación de jornada…”